Ya que estamos en temporada de fresas podemos aprovechar y hacer con ellas gran variedad de postres.
Este es una delicia, un pastel de fresas con nata, parecido al bavaroise pero sin crema inglesa. Se hace con un coulis o salsa de fresa que mantiene el sabor y el color de la fruta. La hice en dos formatos. Para el pequeño, utilicé como base una plancha de bizcocho que tenía congelada de la última tarta de chocolate que os puse y para el grande, una base de galletas con mantequilla.
Es conveniente usar un molde desmontable.
Para los que estais a dieta, se me ocurre que podeis usar la 'falsa nata' de
Tere. Es una opción estupenda.
Ingredientes:
- 200 gr de salsa de fresa
- 200 gr de nata para montar
- 100 gr de azúcar
- 8 gr de gelatina en polvo
- Una plancha de bizcocho o galletas y mantequilla para la base
Salsa de fresas.-
- 400 gr de fresas
- 100 gr de azúcar y un poco de zumo de limón
Elaboración:
Lavamos y troceamos las fresas y las colocamos en un cazo con el azúcar y un poco de zumo de limón. Dejamos que hierva a temperatura media-baja, removiendo de vez en cuando. Cuando haya adquirido consistencia de salsa, la batimos y colamos. Yo no lo he hecho porque me gusta tal cual. Reservamos.
Cortamos una plancha de bizcocho con la medida del molde o preparamos la base de galletas triturándolas y mezclándolas con mantequilla hasta conseguir una pasta con la que cubriremos la base. En este último caso, esta pasta de galletas la puse al horno a 180ºC hasta que se endureció un poco.
Montamos la nata con azúcar a punto fuerte.
En un bol ponemos un poco de agua para disolver la gelatina. Echamos sobre la gelatina la salsa de fresa y batimos bien. A continuación, añadimos la nata montada sobre la salsa y mezclamos con movimientos envolventes.
Volcamos sobre el molde y lo metemos en el frigorífico unas 4 ò 5 horas.
Desmoldamos quitando el aro del molde con cuidado, pasando un cuchillo humedecido en agua caliente.
Antes de desmoldar, cubrí el pastel con salsa de fresas.
